En su último discurso como presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, anunció ante la Asamblea General de la ONU, que entregará el poder el 14 de enero.
El compromiso lo asumió durante el 78 período de sesiones de ese organismo internacional, en Nueva York, Estados Unidos.
En medio de la crisis democrática que atraviesa el país, debido a la judicialización del proceso electoral, el discurso del mandatario se centró en temas de índole internacional. Los únicos aspectos nacionales abordados por Giammattei fueron temas culturales, la inversión en seguridad alimentaria y el diferendo con Belice.
Sin embargo, previo a concluir su participación, el jefe de gobierno anunció que era su último discurso como mandatario.
“Entregaré el poder a quien resultó elector por la soberana voluntad mayoritaria del pueblo de Guatemala. El próximo 14 de enero que se cumple mi mandato constitucional”, destacó el presidente.
El jefe del Ejecutivo comentó en el podio que el reciente evento electoral estuvo marcado por acciones de injerencia internacional innecesaria. Porque si bien la democracia guatemalteca no es perfecta, ha permitido el principio de alternancia en el poder.
Giammattei demanda acciones por la paz
Giammattei dice que las naciones enfrentan el mayor desafío de la historia, que necesita de países fuertes, unidos y listos para la acción. La paz mundial que se ha dado por hecha, hoy renueva la necesidad de un “gran pacto internacional”.
“Crean lo que crea, luchemos por la paz; seamos de donde seamos, luchemos por la paz; sea como sea, luchemos por la paz, o quizás algún día amanezcamos invadidos o asesinados por otros. Por eso unámonos”, declara.
Los temas abordados
La mayor parte de la intervención de Giammattei ha sido dedicada a cuestionar la inactividad de la ONU y demandar una organización renovada. También se refirió al tema de la guerra entre Rusia y Ucrania, exigiendo el retiro de las tropas de Vladímir Putin.
Además, el mandatario indica que si se necesita una misión de paz en Haití, Guatemala está dispuesta a colaborar con efectivos militares. Además, de reiterar la necesidad de reformar la ONU, pide que esta organización sea inclusiva y que le dé participación y voz a Taiwán.