Australia canceló este viernes por segunda vez el visado del serbio Novak Djokovic, quien será detenido el sábado; esto a la espera de que se celebre este fin de semana una vista judicial en la que intentará evitar su deportación.

Tras varios días estudiando el caso, el ministro de Inmigración, Alex Hawke, decidió hoy volver a cancelar el visado de Djokovic; ahora con la intención de expulsarlo del país, lo que también podría implicar la prohibición de volver durante tres años a Australia.

Lee también: Malacateco inicia el fin de semana la defensa de su título en el inicio del Clausura 2022

“Hoy he ejercido mi poder bajo la sección 133C(3) de la Ley de Inmigración para cancelar el visado del Sr. Novak Djokovic. Basado en razones sanitarias y del mantenimiento del orden por ser de interés público”, señaló el ministro en un escueto comunicado al remarcar que sopesó “cuidadosamente” la información proporcionada por las partes.

Tras la anulación, un juez australiano ordenó en una vista de emergencia que Djokovic no sea deportado “de manera inmediata”; esto hasta que la justicia revise el domingo la decisión tomada por el ministro de Inmigración que será impugnada por los abogados del tenista.

Djokovic será detenido la mañana de este sábado cuando se venza su libertad

El juez Anthony Kelly también determinó que Djokovic permanezca en libertad hasta las 8:00 de la mañana del sábado cuando acuda a una cita con los funcionarios de inmigración en la ciudad de Melbourne, en donde será detenido.

Sin embargo, dos agentes de aduanas trasladarán después a Djokovic hasta el lugar donde pueda reunirse con sus abogados para preparar el caso.

La vista se celebrará en el Tribunal Federal, una instancia superior, y se espera que comience y acabe el domingo, un día antes del inicio del Abierto de Australia, que se celebra entre el 17 y el 30 de enero en la ciudad de Melbourne.

Dos cancelaciones del mismo juez y las disculpas de Novak

Djokovic viajó el 5 de enero a Melbourne desde España con una exención médica por no estar vacunado; la razón es haber estado contagiado de COVID-19 recientemente, aunque a su llegada las autoridades de Inmigración le cancelaron el visado y lo detuvieron.

El pasado lunes, un tribunal presidido también por el juez Kelly ordenó la liberación del tenista tras entender que no se le había tratado con “equidad”.

El miércoles, Djokovic admitió que sus representantes cometieron “errores humanos” en su declaración para entrar a Australia; ya que se indicó que no había viajado en los últimos 14 días previos, pero lo cierto es que se había desplazado de Serbia a España.

Además, reconoció un “error de juicio” tras haber acudido a una entrevista con el medio francés L’Equipe el 18 de diciembre en Belgrado; esto a pesar de saber que tenía COVID-19.

Lo que dicen las autoridades de Australia

El primer ministro, Scot Morrison, defendió hoy la segunda cancelación del visado de Djokovic, al destacar los sacrificios realizados por los australianos durante la pandemia en el país, que ha sido uno de los más estrictos a la hora de aplicar restricciones.

“Los australianos han hecho muchos sacrificios durante esta pandemia, y esperan con razón que el resultado de esos sacrificios sea protegido”, dijo el mandatario.