El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo de León, asistió este viernes a una eucaristía celebrada en honor al papa Francisco, fallecido el lunes pasado a los 88 años. La ceremonia tuvo lugar en la Catedral Metropolitana de Ciudad de Guatemala.
Unas 500 personas, incluido el mandatario, participaron en la misa del “eterno descanso” dirigida por el arzobispo metropolitano, monseñor Gonzalo de Villa.
Durante el mensaje, De Villa recordó la labor del papa Francisco al exponer “la realidad de los migrantes que huyeron de condiciones adversas en sus países en busca de una mejor vida”.
Homenaje nacional y representación en el Vaticano
El arzobispo destacó momentos simbólicos de la vida del pontífice, como su caminar solitario en la Plaza de San Pedro durante la pandemia y sus misas en cárceles. “Esas anécdotas muestran el rostro de Francisco, quien quiso transfigurar en su vida el rostro de Jesús”, expresó De Villa.
Arévalo de León lamentó el fallecimiento del papa Francisco. Aunque no asistió al funeral en el Vaticano, envió en representación oficial a la ministra de Cultura y Deportes, Liwy Grazioso.
Guatemala también cuenta con la participación del cardenal Álvaro Ramazzini en el cónclave para la elección del nuevo pontífice. Ramazzini fue nombrado cardenal por Francisco en 2013.
La misa en Ciudad de Guatemala coincidió con la ceremonia de cierre del féretro en la basílica de San Pedro. Presidida por el cardenal camarlengo, Kevin Joseph Farrel, como antesala al funeral del pontífice.
