La Corte de Constitucionalidad de Guatemala ha confirmado este viernes que el presidente electo, Bernardo Arévalo, y su ‘número dos’, Karin Herrera, podrán tomar posesión de su cargo este domingo después de rechazar dos amparos para impedir la transición de poder en el país centroamericano.

La decisión del máximo tribunal constitucional guatemalteco se produce después de que el diputado Rudio Lecsán Mérida, excandidato presidencial por el Partido Humanista, presentara un amparo ante “el riesgo de que se instale un gobierno ilegítimo y antidemocrático”.

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Una acción similar fue remitida a la corte el martes por la asociación cívica Liga ProPatria “ante la amenaza de que el Congreso de la República de Guatemala reciba el juramento y dé posesión del cargo” a Arévalo, así como a Herrera, teniendo en cuenta que “su elección es nula”.

En la víspera, la corte concedió a la vicepresidenta electa un amparo ante la posibilidad de que el Ministerio Público emita una orden de captura en su contra. La Fiscalía acusa a Herrera de incitar las protestas que se produjeron en la Universidad de San Carlos (Usac) en abril de 2022 contra el proceso de elección de un nuevo rector de la institución.

El Ministerio Público ha llevado a cabo numerosas acciones para inhabilitar los resultados de los comicios o ilegalizar a su formación política, Movimiento Semilla, una postura que ha recibido la condena de la comunidad internacional.

Los principales instigadores de esta causa –cuestionada tanto dentro como fuera de Guatemala– son el juez Fredy Orellana; el fiscal anticorrupción, Rafael Curruchiche; y la fiscal general, Consuelo Porras, incluidos en una lista de agentes corruptos elaborada por Estados Unidos. [Foto de portada: EFE]