Después de leer esto, nunca mirarás un banano de la misma manera. Contienen tres azúcares naturales – sacarosa, fructosa y glucosa combinada con fibra.

Un banano te da un impulso instantáneo, sostenido y sustancial de energía, por lo que con solo comer dos tendrás suficiente energía para realizar un trabajo extenuante de 90 minutos de entrenamiento. Por esto y más, el banano es la fruta número uno de los atletas más importantes del mundo.

Lee también: A dos años de la tragedia que provocó la furia del volcán de Fuego

El banano no solo nos da energía para mantenernos en forma. Si lo agregas a tu dieta, podrás prevenir un número sustancial de enfermedades y malestares, entre los que tenemos:

Depresión y nervios:

Una encuesta reciente indicó que personas que sufren depresión se sentían mejor después de comer un banano. Este contiene triptófano, una proteína que se convierte en serotonina, cuyos efectos relajantes mejorarán tu estado de ánimo haciéndote sentir más feliz. Por ser ricos en vitaminas del complejo B ayudan a calmar el sistema nervioso.

PMS -Síndrome Premenstrual-:

Olvídate de las píldoras y come un banano. La vitamina B6 que contiene regula los niveles de glucosa en la sangre, causantes del estado de ánimo.

Anemia:

El contenido de hierro del banano estimula la producción de hemoglobina en la sangre y ayuda en casos de anemia.

Presión arterial:

Por sus grandes cantidades de potasio y no así sal, es perfecto combatiendo la presión arterial. Tanto es así, que el U.S. Food and Drug Administration permitió que la industria bananera promueva la capacidad de la fruta para reducir el riesgo de la presión arterial y accidentes cerebrovasculares.

Los desayunos o meriendas, son excelentes ocasiones para comer banano. (Foto: Pixabay)

Poder mental:

200 estudiantes de una escuela en Twickenham, Inglaterra, consumieron bananos en el desayuno, media mañana y almuerzo en una prueba para aumentar su capacidad cerebral. La investigación demostró que el potasio contenido en la fruta puede ayudar al aprendizaje, dándoles mayor capacidad de alerta.

Estreñimiento:

Su alto contenido en fibra, te puede ayudar a normalizar los intestinos sin recurrir a laxantes.

Resacas:

Un batido de banano con miel, es una forma rápida de curar la resaca. El banano calma el estómago y, con la ayuda de la miel reconstituye los niveles de azúcar en la sangre, mientras que la leche calma y rehidrata tu sistema.

Acidez:

Al poseer un efecto antiácido natural en el cuerpo, si sufres de acidez, come un banano para obtener alivio calmante.

Picaduras de mosquitos:

Antes de aplicar ungüentos contra picaduras de mosquito, prueba frotarte con la parte interior de la cáscara. Es sorprendente reduciendo la hinchazón y la irritación del área afectada.

La cáscara de banano es eficaz para las molestas picaduras de zancudos. (Foto: Pixabay)

Úlceras:

El banano es usado como alimento dietético contra desórdenes intestinales por su blanda y suave textura. Es la única fruta cruda que se puede comer sin angustia en casos crónicos. También neutraliza el exceso de acidez y reduce la irritación al cubrir la mucosa del estómago.

Control de Temperatura:

Muchas culturas ven al banano como una fruta “termostato”, que puede bajar la temperatura física y emocional de las mujeres embarazadas. En Tailandia, por ejemplo, las mujeres embarazadas comen bananos para asegurarse que sus bebés nazcan con una temperatura fresca.

Guatemala es uno de los mayores productores de banano. Consumamos lo nuestro mientras cuidamos nuestra salud. (Foto: Pixabay)

El banano es un remedio natural para muchos males. Comparándolo con una manzana, tiene cuatro veces la proteína, el doble de carbohidratos, tres veces más fósforo, cinco veces la vitamina A y hierro, y el doble de otras vitaminas y minerales, además es rico en potasio.

Así que por qué no usar la frase: “Con un banano al día mantendrás al médico alejado”.