El exceso de mortalidad a causa del COVID-19 superó las 15 mil muertes en Guatemala, según un informe emitido por la ONG Laboratorio de Datos GT; esto luego de un año del primer fallecimiento por la pandemia en el país.

La organización advirtió que, desde que se mostró un exceso de mortalidad a finales de mayo, hasta el pasado 5 de febrero, el Registro Nacional de las Personas ha contabilizado 15 mil 424 muertes más que el promedio de los últimos cinco años.

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El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, en cambio, ha registrado 6 mil 599 muertes desde el pasado 15 de marzo de 2020; esto cuando el Gobierno reportó la primera baja a causa del coronavirus, correspondiente al segundo paciente infectado.

El exceso de muertes investigado por Laboratorio de Datos da cuenta de que hubo un 26 % de más muertes en esas semanas; se debió por causas “directas o indirectas” de la pandemia.

La cartera sanitaria únicamente contabiliza y hace públicos los decesos a causa del COVID-19 que suceden dentro del sistema hospitalario o de salud; en cambio, el Registro de las Personas analiza otras variables, como las muertes domiciliarias o en la vía pública.

Incluso, el Registro ha advertido que hay más de 8 mil muertes en hospitales reportadas como “sospechosas, posibles o contacto de la covid-19”, aseguró el Laboratorio.

Exceso de muertes en Guatemala tienen relación directa o indirecta al COVID-19

El ingeniero y analista de datos de la entidad, Óscar Chávez, aseguró que el “exceso de mortalidad debe ser interpretado como defunciones tanto directamente o indirectamente asociadas al COVID-19; así como con otras defunciones que de manera indirecta se asocia a la situación”.

Entre estas menciona “la falta de tratamiento médico, los confinamientos, la falta de acceso a servicios o bien casos no registrados por ninguna autoridad”.

También subrayó que a medida de que pasa el tiempo, será menor el porcentaje de exceso de muertes relacionado con el COVID-19. Durante la primera ola el porcentaje superó ese el 40 %, de acuerdo con el análisis entregado por la misma organización en octubre pasado.

Rezago en la vacunación

La ONG también profundizó sobre la situación de las vacunas aplicadas por el Ministerio de Salud, que muestran un panorama desalentador; además que podría “cumplir sus propios objetivos, pero en seis años”, indicó el ingeniero en sistemas Carlos Duarte.

“Según el Gobierno ha aplicado 42 mil dosis, pero, a pesar del ingreso desde el 2 de marzo más de 200 mil dosis, la aplicación avanza muy despacio con relación al acumulado. La meta del Gobierno es administrar 10 mil vacunas al día. Sin embargo, no estamos cerca de llegar en este mes a cubrir el objetivo de inmunizar con la primera dosis a la primera línea del plan de vacunación, englobada en el personal de salud”, agregó.

Además de la “falta de información” sobre los sitios disponibles para vacunarse y de las negociaciones y compras de vacunas, así como de una “nula” campaña de comunicación, Laboratorio de Datos encontró otros omisos, como a quién se ha aplicado la vacuna.

Pandemia de contrastes

Karin Slowing, quien coordina el proyecto fiscalizador, asegura que hubo medidas correctas que impidieron el avance temprano de la pandemia; sin embargo, estas fueron adoptadas desde un punto de vista autoritario. Slowing es exsecretaria de Planificación de la Presidencia -2008-2012-.

Hay otros factores que, a su criterio, consiguieron que la pandemia no fuera la catástrofe de otras naciones, como “la ruralidad; esto porque prácticamente más de la mitad del país es rural, con una alta dispersión social y baja demografía”.

Sin embargo, en las ciudades la proliferación de contagios se ha mantenido, pese a varias de las medidas y las muestras de constante relajamiento de la sociedad y de las restricciones gubernamentales.

El presupuesto, además, mantiene una ejecución baja con apenas el 1,2 % gastado de los 390 millones de dólares designados por el Congreso para tema covid este año, indicó el economista Enrique Maldonado.

Añadió que el año pasado, de los más de 159 millones de dólares dispuestos para atender a la pandemia, se concluyó con la ejecución del 78,2 %.

“El Ministerio de Salud continúa con los mismos problemas para ejecutar. Debe mejorar la gestión público financiera a lo interno para lograr una gestión más fácil”, aseveró; además lamentó la complejidad de acceso a la información en la cartera sanitaria.