El fantasma de la violencia política ha empañado la campaña política en El Salvador; de cara a los comicios del 28 de febrero generando múltiples reacciones de condena.

Tras un ataque armado, hasta ahora confuso; contra simpatizantes del opositor Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, FMLN; dos personas fueron asesinadas en plena campaña política.

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En las redes sociales, especialmente Twitter, algunos usuarios se remontan a los tiempos de la guerra civil, 1980-1992; donde solamente había dos bandos -el Ejército y la guerrilla- y donde, se decía, que asesinaban a las personas “por pensar diferente”.

También se han creado las etiquetas #NoMasDiscursoDeOdio y #NoMasOdioSV, con las que los ciudadanos han condenado y rechazado el hecho.

Los representantes de la comunidad internacional en el país centroamericano se volcaron a condenar el ataque y a pedir una investigación que permita esclarecer lo sucedido.

También el secretario general de la Organización de los Estados Americanos -OEA-, Luis Almagro, se sumó a las condenas contra el asesinato y solicitó a la Fiscalía que “investigue y que se juzgue a los responsables de estos hechos”.

Celia Medrano, de la organización Cristosal, señaló la noche del lunes que “se han pronunciado en el mismo tono la Embajada de Estados Unidos en El Salvador, la representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD, Georgiana Braga-Orillard, el congresista estadounidense Jim McGovern, entre otros”.

“No debe caber duda alguna de la gravedad de lo sucedido el #31Enero2021 #NoMasDiscursoDeOdio #NoAlDiscursoDeOdio”, reflexionó.

La delegación de la Unión Europea en El Salvador y los jefes de Misión Diplomática de la UE residentes en el país señalaron en un comunicado que “la erradicación de la violencia política en El Salvador es un gran patrimonio colectivo del país que debe ser preservado”.

Campaña política y las tensiones previo a las elecciones

Las autoridades aún no establecen si el suceso es fruto de las fricciones de la política en el país o de la violencia social, pero ya ha disparado las alarmas entre los partidos de oposición que señalan al presidente Nayib Bukele de fomentar la división y el odio.

El presidente Bukele no reaccionó al ataque con un mensaje claro de condena, sino que insinuó, de acuerdo al análisis de periodistas locales y de defensores de derechos humanos, que era parte de una estrategia política del mismo FMLN para ganar simpatías electorales.

El partido Nuevas Ideas, NI, que surgió de un movimiento impulsado por Bukele; es dirigido por un primo suyo. Aun no se ha sumado a la condena; y tampoco mandó a un representante a una reunión urgente convocada por el fiscal general, Raúl Melara, para abordar dicha situación.

Ni se prevé como el principal ganador de los comicios del 28 de febrero, según diversas encuestas.