La dimisión de Francisco Jiménez al frente del Ministerio de Gobernación (Mingob) abre un proceso de transición. Este que busca garantizar la continuidad de las operaciones de seguridad mientras se define a la nueva autoridad.
El presidente Bernardo Arévalo aceptó su abdicación, pero continuará en funciones hasta que el relevo sea oficial.
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A través de su cuenta de X, Jiménez confirmó la decisión y explicó que permanecerá en el cargo. Esto “conforme a la ley”, para conducir un traspaso ordenado. “El presidente Bernardo Arévalo aceptó mi renuncia y concluiré funciones cuando sea nombrado y tome posesión el nuevo ministro”, indicó.
Jiménez aseguró que el proceso se realiza con total transparencia y que el objetivo es entregar la institución con toda la información, planes y líneas estratégicas necesarias. “Este nivel de traslado de información jamás se había dado en el Mingob”, afirmó, al señalar que los operativos de la Policía Nacional Civil (PNC) continúan sin interrupciones.
Asimismo, reiteró su compromiso de dejar sentadas las bases para que el próximo titular de la cartera del Interior tenga una gestión exitosa y mantenga la coordinación interinstitucional.
El Señor Presidente @BArevalodeLeon aceptó mi renuncia y concluiré funciones cuando sea nombrado y tome posesión el nuevo ministro(a).
Hasta ese momento continuaré en funciones conforme a la ley, estoy conduciendo una proceso de transición ordenado y transparente, orientado al…
— Francisco Jiménez (@FJimenezmingob) October 16, 2025
Salida de Francisco Jiménez y la continuidad de los operativos
En cadena nacional, el jefe de Estado anunció medidas para reforzar la seguridad pública. Esto tras la evasión de 20 reos del Centro de Detención para Hombres Fraijanes II. Una de las primeras disposiciones fue aceptar la renuncia de Jiménez. Además, la de los viceministros Claudia Palencia, de Antinarcóticos, y José Portillo, de Seguridad, a quienes agradeció sus servicios.
El presidente adelantó que los nuevos funcionarios se darán a conocer en los próximos días. Entre los proyectos que se anunciaron figura la construcción, en un plazo de 12 meses, de una cárcel de máxima seguridad para pandilleros.
Se continuará con la remodelación de las prisiones existentes, se iniciará un censo nacional de la población reclusa y la creación de una Fuerza de Tarea Anticorrupción. Asimismo, se emprenderá el rescate y fortalecimiento integral del Sistema Penitenciario.
Antes de dejar el cargo, el viceministro de Seguridad, José Portillo, acudió al Ministerio Público para denunciar supuestos actos anómalos en el Ministerio de Gobernación. Aseguró haber informado de los hechos a la Comisión Nacional contra la Corrupción (CNC); sin embargo, la entidad aclaró que no recibió acusación alguna de su parte. La CNC confirmó que, hasta la fecha, no cuenta con registro de ningún expediente presentado por Portillo.
