El presidente estadounidense, Joe Biden, prometió luchar por un mundo libre de armas nucleares en un mensaje que dejó por escrito en el Museo de la Bomba Atómica de Hiroshima.

Los líderes del G7 acudieron el viernes el Museo y Parque de la Paz de Hiroshima (oeste de Japón), en una visita histórica dirigida a enviar un fuerte mensaje en contra de las armas nucleares, y donde se reunieron con una superviviente y firmaron el libro de visitas.

Lee también: Continúan las evacuaciones e inundaciones en Italia

“Que las historias de este Museo nos recuerden a todos nuestras obligaciones para construir un futuro de paz. Juntos, sigamos avanzando hacia el día en que finalmente y para siempre podamos librar al mundo de las armas nucleares. ¡Hay que mantener la fe!”, escribió Biden.

El presidente estadounidense, que tenía tres años cuando EE. UU. lanzó una bomba nuclear sobre Hiroshima, se convirtió ayer en el segundo mandatario de la primera economía mundial en visitar este museo, después de que hiciera lo propio el entonces presidente Barack Obama en 2016.

Víctima de Hiroshima

Los líderes de otras potencias nucleares, como Francia y Reino Unido, dejaron también mensajes en este libro, y expresaron buenos deseos hacia las víctimas del bombardeo atómico, aunque de forma más velada que Washington.

“Con emoción y compasión, nos corresponde contribuir al deber de recordar a las víctimas de Hiroshima y actuar en favor de la paz, la única lucha que merece ser librada”, dijo el presidente de Francia, Emmanuel Macron.

El primer ministro británico, Rishi Sunak, citó a Shakespeare y señaló que “el lenguaje falla a la luz del fogonazo de la bomba. No hay palabras para describir el horror y el sufrimiento de la gente de Hiroshima y Nagasaki. Pero lo que podemos decir, con todo nuestro corazón y toda nuestra alma, ya no existe”.

Los mandatarios de Japón, Alemania, Canadá, Francia, Italia, Reino Unido y Estados Unidos participaron en esta visita antes del comienzo formal de la 49 cumbre del Grupo de los Siete que se celebra desde el 19 hasta el 21 de mayo en la ciudad nipona, la primera en ser atacada con una bomba atómica.

“Hibakusha”

Durante la visita al museo, que según medios locales duró entre 30 y 40 minutos, los líderes se reunieron con una “hibakusha” -superviviente- de Hiroshima, un encuentro del que no ha trascendido aún el contenido.

Hiroshima quedó devastada el 6 de agosto de 1945, cuando el avión Enola Gay soltó sobre la ciudad la primera bomba nuclear utilizada en combate real y bautizada como “Little Boy”, precipitando la rendición de Japón y el final de la Segunda Guerra Mundial.

Esta bomba acabó de forma inmediata con la vida de unas 80 mil personas, cerca del 30 % de la población de entonces. A finales de 1945, el balance se elevaba a unas 140 mil y en los años posteriores las víctimas por los efectos de la radiación sumaron más del doble.