En Guatemala el cáncer es la segunda causa de muerte entre las enfermedades no transmisibles, pero hay un antioxidante natural que produce el cuerpo que puede ayudar a prevenir esta enfermedad. En la última década se han registrado más de 28 mil casos, una cifra preocupante que sigue en aumento año con año.
Aunque el diagnóstico temprano sigue como algo fundamental, cada vez más especialistas en salud coinciden en que la prevención debe abordarse desde una visión más amplia. Debe contemplarse la nutrición, el metabolismo y el estilo de vida como factores clave.
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En ese contexto, una molécula producida naturalmente por el cuerpo humano está comenzando a cobrar protagonismo en la comunidad científica. Se trata del glutatión.
Este antioxidante cumple un rol crucial en la desintoxicación celular y en la protección frente al daño oxidativo, lo que lo convierte en un posible aliado en la prevención de enfermedades degenerativas como el cáncer.
Glutatión, el antioxidante que puede ayudar a prevenir el cáncer
Científicos y profesionales de la salud empiezan a poner la mirada en el glutatión, u antioxidante natural poco conocido pero de enorme potencial.
Se trata de una molécula, producida por el cuerpo humano. Es algo que podría convertirse en una herramienta poderosa dentro de la prevención integral de enfermedades degenerativas, en especial del cáncer.
De acuerdo con datos oficiales del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), se registraron más de 28 mil casos de cáncer en la última década. Es una cifra que crece año con año.
En ese contexto, el científico Hugo Palafox, experto en metabolismo humano y nutrición celular, destaca el papel central del glutatión en el sistema de defensa del organismo.
“Se le conoce como el ‘antioxidante maestro’ por su capacidad para neutralizar radicales libres, desintoxicar órganos como el hígado y fortalecer el sistema inmunológico. Su función es clave para proteger nuestras células del daño oxidativo”, explica el experto.
El científico también destacó que el glutatión se encuentra en casi todas las células del cuerpo. Sin embargo, su producción puede disminuir con el estrés, la mala alimentación, la exposición a contaminantes, ciertos medicamentos y con el envejecimiento. Esta baja producción de glutatión puede debilitar la capacidad natural del organismo y las células para defenderse de afecciones como el cáncer, enfermedades metabólicas y el deterioro cognitivo.
¿Por qué no tomarlo?
Ante esto, surge una pregunta frecuente: si los niveles de glutatión disminuyen, ¿por qué no simplemente tomarlo? La razón es que el glutatión oral se descompone rápidamente en el proceso digestivo, lo que reduce significativamente su efectividad. Por ello, el especialista recomienda estimular su producción natural mediante el consumo de proteínas ricas en cisteína, como las que se encuentran en suplementos derivados del suero de leche no desnaturalizado.
“Mantener niveles óptimos de glutatión puede lograrse a través de hábitos como una dieta rica en vegetales crucíferos (brócoli, espinaca, ajo, cebolla), dormir entre siete y ocho horas por noche, evitar el cigarro y el alcohol, y realizar actividad física regular. No obstante, en personas con alta exposición a factores de riesgo como contaminación, estrés crónico o tratamientos médicos agresivos, la suplementación especializada puede convertirse en un apoyo fundamental para fortalecer las defensas del organismo”, explica.
“No se trata de prometer curas milagrosas, sino de crear conciencia en las personas a través de herramientas prácticas para que cuiden su salud. El cáncer no se combate solo en hospitales, también se realiza a través de la alimentación, en los hábitos y en el conocimiento”, concluye Palafox.
En un país donde las cifras de cáncer continúan en ascenso, hablar de prevención no puede seguir siendo una opción secundaria. Es momento de evolucionar hacia estrategias integrales que incluyan nutrición celular, inmunidad y autocuidado como pilares de la salud. Y en esa ruta, el glutatión podría tener un papel decisivo.