La langosta voladora, perteneciente a la familia de los ortópteros, es reconocida por su impacto devastador en los cultivos, especialmente cuando alcanza grandes poblaciones.
En Guatemala, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) es responsable de prevenir y combatir estas plagas que amenazan la seguridad alimentaria.
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Medidas implementadas en Jutiapa
Recientemente, el Departamento de Vigilancia Epidemiológica y Análisis de Riesgo del Viceministerio de Sanidad Agropecuaria y Regulaciones llevó a cabo acciones en las áreas aledañas al volcán Las Víboras, en el municipio de Atescatempa, Jutiapa, para controlar la población de langosta voladora. Las medidas incluyeron fumigaciones constantes y el monitoreo técnico a los productores de la región.
Se aplicaron 2 mil litros de mezcla de cipermetrina en 100 hectáreas con el fin de reducir la densidad poblacional de este insecto. Estas intervenciones son esenciales, ya que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) advierte sobre la capacidad destructiva de la langosta voladora, que puede consumir diariamente su propio peso en alimentos.
Ciclo de vida y adaptación de la langosta voladora
Este insecto es altamente adaptable a diferentes condiciones climáticas, lo que facilita su propagación en múltiples entornos. Además, su capacidad reproductiva es notable. Puede reproducirse dos veces al año, requiriendo un enfoque estratégico para mantener el control efectivo sobre su población.
La langosta voladora se alimenta de más de 400 tipos de plantas, lo que la convierte en una amenaza significativa para la agricultura. Un enjambre de este insecto puede destruir hasta 100 toneladas de vegetación en un solo día. Esto subraya la importancia de las intervenciones del MAGA.
Resultados y control de la plaga
Gracias a las acciones de control realizadas en Jutiapa, el MAGA ha logrado mantener bajo control la población de langosta voladora en la zona. Esta labor se enmarca dentro del objetivo estratégico del ministerio de garantizar la producción de alimentos sanos e inocuos, mediante servicios especializados de sanidad vegetal y control de plagas.
El acompañamiento técnico y profesional a los agricultores de la región ha sido clave para mitigar el impacto de esta plaga y asegurar la protección de los cultivos, fortaleciendo así la seguridad alimentaria en Guatemala. [Tomado de AGN]
