El juicio por genocidio en Guatemala contra el general retirado Benedicto Lucas García, acusado de la masacre de cientos de indígenas en 1981 durante el conflicto armado interno (1960-1996), cambiará de juez tras una decisión de una sala de Apelaciones.
La Sala de Apelaciones Primera de Mayor Riesgo del Organismo Judicial guatemalteco emitió el dictamen este jueves. Los magistrados Miriam Regina Brolo, Marco Tulio Pérez Lemus y Jorge Emilio Morales Quezada comunicaron la decisión, dejando el proceso en manos de otro tribunal.
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#Actualidad 🚨 Más de 40 años esperando justicia: anulan juicio por el caso Genocidio Ixil
La Sala Primera de Apelaciones de Mayor Riesgo anuló el juicio contra el Benedicto Lucas García, acusado de genocidio contra el pueblo Ixil. Tras más de 90 audiencias.
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Lucas García recusó al juez del caso
La Sala Primera de Mayor Riesgo aceptó la recusación presentada por Lucas García contra el juez Gervi Sical, quien lideraba el tribunal desde mayo pasado. Este cambio pone en riesgo el futuro del proceso judicial, que ya había alcanzado cerca de 100 audiencias y se aproximaba a la fase de conclusiones.
Jovita Tzul, abogada de la parte acusadora, señaló que la resolución fue “sorpresiva” y afirmó que “nuevamente el sistema les niega la justicia” a las víctimas del genocidio.
#Actualidad | Francisco Vivar, abogado en el caso de genocidio contra Benedicto Lucas García dijo que analizarán la resolución previo a accionar.
Agregó que con decisiones arbitrarias como la de la Sala, están dejando en vulnerabilidad a las víctimas.📽️@elMonocular pic.twitter.com/Sluo8XTdbN
— eP investiga (@eP_investiga) November 28, 2024
Contexto de las acusaciones contra Lucas García
Lucas García, de 92 años, enfrenta acusaciones de genocidio por hechos ocurridos entre 1981 y 1982 en el departamento de Quiché, al norte de Guatemala. Según el Ministerio Público, el general retirado ejecutó la masacre como jefe del Estado Mayor del Ejército durante el conflicto armado interno.
El pasado 7 de noviembre, la Fiscalía solicitó una pena de 30 años de prisión contra Lucas García por los delitos de asesinato y desaparición forzada. Esta es la pena máxima permitida por la ley guatemalteca.
Vinculación con otros casos
Además del juicio por genocidio, Lucas García ya cumple una condena por la desaparición forzada del niño Marco Antonio Molina Theissen en 1981. Actualmente, cumple su sentencia en un hospital y asiste a las audiencias mediante teleconferencia.
El genocidio indígena ocurrió en varios poblados del departamento de Quiché en 1982, dejando un saldo de 250,000 personas asesinadas o desaparecidas durante el conflicto armado interno. Según informes de organismos internacionales, el 90 % de estas muertes fueron atribuidas al Estado.