La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha aprobado la primera vacuna del mundo para prevenir el chikungunya, una enfermedad transmitida por mosquitos que puede causar dolor debilitante en las articulaciones durante meses o años.

La vacuna, vendida bajo la marca Ixchiq, llega en un momento en que los expertos en salud pública están cada vez más preocupados por la propagación de enfermedades transmitidas por vectores a nuevas regiones debido al cambio climático, lo que representa un mayor riesgo para la salud humana, según ha informado el periódico ‘The Washington Post’.

“La aprobación de hoy aborda una necesidad médica no cubierta y es un avance importante en la prevención de una enfermedad potencialmente debilitante con opciones de tratamiento limitadas”, ha afirmado el director del Centro de Evaluación e Investigación de Productos Biológicos de la FDA, Peter Marks, en un comunicado.

Chikungunya

El chikungunya es una enfermedad viral que se transmite a los humanos a través de las picaduras de mosquitos Aedes infectados, específicamente Aedes aegypti y Aedes albopictus. Sus síntomas incluyen fiebre alta, dolor intenso en articulaciones y músculos, dolores de cabeza y sarpullido.

Hasta ahora se han identificado casos de chikungunya en más de 110 países de Asia, África, Europa y América y, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se han notificado más de dos millones de casos en todo el mundo desde 2005.

Antes de 2006, el virus rara vez se identificaba en viajeros estadounidenses, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, pero desde entonces, ha habido un promedio de 28 personas por año que dan positivo a la enfermedad y en 2022 los CDC informaron de 81 casos relacionados con viajes.

A los expertos en salud pública les preocupa que el número de casos siga aumentando porque las temperaturas más cálidas son óptimas para que los mosquitos que portan el virus se multipliquen y prosperen.

“Esta es, en gran medida, una vacuna para el futuro porque el chikungunya aún no está aquí en gran medida, pero parece que lo estará en las próximas décadas”, ha dicho el decano de la Escuela Nacional de Medicina Tropical del Baylor College of Medicina y codirector del Centro para el Desarrollo de Vacunas del Texas Children’s Hospital, Peter Hotez.

Cambio climático

Hotez ha explicado que el cambio climático y la urbanización son los principales culpables de la creciente prevalencia de enfermedades transmitidas por vectores como el chikungunya y ha añadido que la aprobación de Ixchiq sienta las bases para otras vacunas para tratar enfermedades relacionadas con los mosquitos.

La FDA ha aprobado Ixchiq, fabricado por la empresa de biotecnología Valneva Austria GmbH, como inyección de dosis única para personas mayores de 18 años que tienen un mayor riesgo de exposición a la enfermedad.

La aprobación se ha otorgado a través del proceso de aprobación acelerada de la FDA, que está diseñado para acelerar tratamientos “razonablemente probables” para enfermedades graves o potencialmente mortales. Bajo este proceso, la FDA ha evaluado la seguridad de la vacuna en dos estudios clínicos y ha probado su eficacia en los niveles de anticuerpos presentes en 266 participantes que recibieron la vacuna.

Eficacia

Se necesitan más datos sobre la vacuna para confirmar su eficacia y la gravedad de sus efectos secundarios, que incluyen dolores de cabeza, dolores musculares, fiebre y sensibilidad en el lugar de la inyección. Como parte del proceso de aprobación, la FDA exige que el fabricante realice estudios adicionales después de que se hayan administrado las inyecciones.

“A medida que se implemente esta vacuna, será importante saber que previene enfermedades, y esos son los tipos de pasos que deben tomarse para confirmar que será un éxito de salud pública”, ha relatado el médico especializado en enfermedades infecciosas y epidemiólogo de la Escuela de Salud Pública de Yale, Albert Ko.

No existen tratamientos antivirales específicos ni otras intervenciones preventivas para el chikungunya, ya que la mayoría de los síntomas agudos se resuelven en unos pocos días, pero algunas personas pueden desarrollar dolor artrítico prolongado. Las personas con mayor riesgo de desarrollar una enfermedad grave son los recién nacidos que se infectaron en el momento en que nacieron y las personas mayores de 65 años.