Con la brasa aún de la llama de los Juegos Olímpicos, prende ahora la de los Paralímpicos, desde el 24 de agosto al 5 de septiembre, donde 4 mil 400 deportistas de los cinco continentes pretenden hacer visibles los ejemplos de superación de cada uno de los participantes.

Aquí ponemos en el escaparate a algunos de los más reconocidos.

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Omara Durand (Cuba, atletismo)

La deportista cubana acude a Tokyo 2020 con la etiqueta de la “reina del atletismo”. A sus 29 años, Durand es la paralímpica más rápida, como demuestran los récords mundiales que posee: en 100 metros (11,4 segundos), 200 (23,03) y 400 (51,77).

La cubana compite en la categoría T12 de discapacidad visual, debido a la catarata congénita que padece, una enfermedad que causa una miopía crónica que la impide ver de lejos y un astigmatismo que le hace imposible enfocar la visión.

Tras su paso por los Juegos de Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, donde consiguió cinco medallas de oro, en Tokio pretende conseguir tres metales más.

Teresa Perales (España, natación)

La nadadora española de 45 años no se conforma con las 26 medallas conseguidas en las últimas cinco ediciones de los Juegos, aunque su presencia en Tokio no será en las mejores condiciones debido a una luxación en el brazo izquierdo que sufrió el pasado 17 de mayo y que le ha mermado facultades en su preparación paralímpica.

Ganadora de siete oros, nueve platas y diez bronces, Perales se ayuda desde los 19 años de una silla de ruedas tras sufrir una neuropatía que le provocó una paraplejia.

Daniel Dias (Brasil, natación)

Si Teresa Perales acumula 26 medallas, el nadador brasileño no anda lejos. Dias, conocido como el “Phelps de los paralímpicos”, ha conseguido 24 medallas en tres ediciones de los Juegos, que incluyen 14 oros, además de 40 medallas en campeonatos mundiales y 33 en los Parapanamericanos.

A sus 33 años, ha anunciado que los de Tokyo 2020 serán sus últimos Juegos, un evento “único e increíble en los que voy a participar”, ha declarado.
Dias, que nació con deformaciones en sus pies y manos, ha repetido en diversas ocasiones que su motivación “es poder mejorar todo el tiempo y demostrar que puedo llegar más lejos, tener mejores registros”.

En la capital japonesa tiene una nueva oportunidad de agrandar su historial.

Diede De Groot (Países Bajos, tenis en silla de ruedas)

La neerlandesa es una de las favoritas al oro en tenis en silla de rueda, después de su brillante palmarés.

Ganadora de todos los títulos individuales en los cuatro Grand Slam y varios en dobles, De Groot, de 24 años, pretende que los Juegos de Tokio sean los de su consagración paralímpica, tras su actuación en Río de Janeiro, donde no destacó en el cuadro individual y ganó una plata en dobles.

Markus Rehm (Alemania, atletismo)

La medalla de oro en salto de longitud está reservada para este alemán de 32 años, que compite con una prótesis tras la amputación de su pierna derecha.

Rehm acude a la capital nipona como plusmarquista mundial de esta prueba, con un salto de 8.62 metros, una marca que le hubiera permitido competir en los Juegos Olímpicos.

Ganador de cuatro Campeonatos del Mundo y cinco de Europa, Rehm, apodado “The Blade Jumper”, pretende sumar su tercera medalla de oro paralímpica, tras sus triunfos en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.

Tatyana McFadden (Estados Unidos, atletismo en silla de ruedas)

Una de las grandes estrellas del atletismo. La estadounidense de origen ruso va camino de superar a la canadiense Chantal Petitclerc (ganadora de 21 medallas entre 1992 y 2008) como la atleta en pista más condecorada de la historia.

McFadden ha ganado dieciséis medallas en los Juegos de Verano desde 2004 hasta 2016, siete oros, seis platas y tres bronces, a los que hay que añadir la plata conseguida en la prueba de esquí en los Juegos de Invierno de Sochi 2014.

La polifacética deportista, nacida en San Petersburgo hace 32 años con espina bífida, quiere rematar su historial intentando alcanzar otras seis medallas en las pruebas de atletismo en las que participa con lo que superaría a Petitclerc.

En Río de Janeiro logró seis metales, cuatro oros (400, 800, 1.500, y 5.000 metros, en la categoría T54) y dos platas (100 metros y maratón).

En su brillante historia reposa la hazaña de ganar 24 grandes maratones mundiales, y la única que ha cruzado la meta en primer lugar en los cuatro grandes: Boston, Chicago, Nueva York y Londres, en la  misma temporada en cuatro años consecutivos. Todo un ejemplo de superación.