Con dos mochilas, una donde guarda una mudada y en la otra una sábana para poder taparse en horas de la noche, así se le ve en las calles del Centro Histórico al maestro y artista de la ópera, Mario Melgar. Actualmente, el cantante guatemalteco vive en situación de calle y enfrenta sus propios problemas ante la pandemia del coronavirus.

Melgar hoy en día, no tiene casa, dinero o trabajo para sobrevivir, y le toca que vivir con la ayuda de las personas que amablemente le regalan ya sea un plato de comida o una moneda.

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El reconocido artista, que en su mejor época dio conciertos a nivel nacional e internacional habló cómo está viviendo en estos tiempos.

“Tengo alumnos en sala de espera”, dijo en una entrevista que fue publicada en YouTube por el usuario denominado Colibrí. Al no tener transporte, “no puedo llegar a sus residencias”, explicó Melgar.

El maestro de canto y locución a diferencia del resto de catedráticos, no comparte la idea de dar clases en línea. “Considera que por las redes sociales no es suficiente porque se necesita que los alumnos tengan a su guía personalizado. Ya que el maestro debe observarlos y ver cómo respiran”, añadió.

La Plaza de la Constitución, su nueva casa

Mario Melgar, muy amigo del otro gran artista guatemalteco, Alberto Navas, perdió mucho después de la muerte de Navas. Ya que familiares de Alberto lo llevaron a un litigio ante la justicia guatemalteca por varias diferencias, pero terminó, según contó, ganando el juicio.

Al perder su hogar, el cual estaba en las instalaciones de la academia de Navas, Melgar contó que le toca dormir “donde la providencia me da”. Asimismo, en los alrededores del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social -IGSS- en la zona 9 capitalina.

Así lucha en los tiempos de pandemia

Ante la pandemia del coronavirus, el cantante internacional vive una situación difícil. Él explica que el presidente del país, Alejandro Giammattei, debió pensar en habilitar un albergue para las personas que viven en situación de calle para que por lo menos tengan donde pasar la noche.

Melgar, pese al peligro que existe al no usar mascarilla, comentó que él no la usa “porque tengo que recibir un aire puro. Al usarla, estaría absorbiendo el mismo tóxico que expulso de mi cuerpo y lo ingresaría de nuevo a mis pulmones”, añadió.

Mario Melgar y su diferencia con el gremio artístico

Robo de pertenencias: DPI y celular. Me siento como un invasor dentro de mi propio país. Para tramitarlo necesito al menos Q175.

Melgar reconoce que no está asociado a ninguna de las asociaciones artísticas del país. Argumentó que ha sido “degradado, humillado y tildado de ladrón”.

Aún así, recuerda que “les he cantado en los dos últimos años en el Día del Compositor -24 de octubre-“; y denuncia que fue amenazado que si no se asociaba a algún ente no lo dejarían trabajar.

Lo que lo motiva a seguir luchando en esta vida

Para el maestro Melgar, es importante “mantenernos con nuestros valores que nos enseñaron: humildad, honestidad, sinceridad, honradez, y sobre todo optimismo pese a todas las adversidades”.

Si las personas quisieran apoyar y ayudar a Melgar, él se encuentra en la Plaza de la Constitución hasta las 14:00 horas. Posteriormente, se traslada al IGSS de zona 9, donde pasa la noche.