Al menos catorce personas, entre ellas nueve mujeres y cuatro menores, murieron hoy al naufragar dos embarcaciones frente a las costas del puerto de Sfax, segunda ciudad de Túnez; informó el portavoz de la Guardia Costera local, coronel Housemeddine Jebabli.

En declaraciones a la radio local “Mosaïque FM”, el responsable aseguró que otras 140 personas fueron rescatadas; además las operaciones de búsqueda prosiguen en la zona, por lo que la cifra de víctimas podría variar en las próximas horas.

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Según su relato, varias patrulleras salieron al rescate tras recibir una llamada de socorro y llegaron a la zona donde hallaron las dos barcas parcialmente hundidas; a los migrantes rescatados, en su mayoría de diferentes países del África Subsahariana, y varios cuerpos que flotaban a la deriva en un mar agitado.

“Entre ellos hay nueve mujeres y cuatro menores”, explicó el coronel sin ofrecer otro tipo de detalles.

El peor naufragio del año con las dos embarcaciones en Túnez

Este es el naufragio más trágico ocurrido en lo que va de año en las costas de Túnez; país que se ha convertido en uno de los trampolines de la migración irregular en el Mediterráneo Central. Está además considerada la ruta migratoria más mortífera del mundo.

El pasado 26 de febrero la Guardia Costera tunecina interceptó a siete jóvenes que trataban de cruzar el Mediterráneo en una barca y llegar a las costas de Europa desde las playas de la ciudad costera de Kelibia, a unos 200 kilómetros al sur de la isla italiana de Lampedusa.

Los jóvenes, que tenían entre 15 y 25 años y fueron entregados a las autoridades judiciales. Habían salido desde la pequeña localidad de Menzel Temime; estaban agarrados a la embarcación después de que esta hubiera volcado por las difíciles condiciones de viento en la zona.

Días antes, unidades de la Guardia Marítima en la ciudad costera de Sousa, interceptaron otro grupo de personas que se aprestaban a salir desde una playa rumbo a Europa; viajaban dieciocho hombres, siete mujeres y un menor.

En la misma semana, un migrante murió tras interceptar una patrullera tunecina un bote que navegaba a la deriva en alta mar con 24 personas.

Según el Ministerio de Defensa la embarcación había abandonado la playa el martes. La descubrieron a unos 23 kilómetros al sur de la isla de Kerkenah, situada frente al puerto industrial de Sfax, cuando los migrantes trataban de que no se hundiera.