Un reciente estudio ha analizado cómo el uso de tecnología en niños influye en su desarrollo cognitivo y social.
La investigación, realizada por expertos de varias universidades, revela que los dispositivos digitales pueden mejorar habilidades como la colaboración y la empatía, pero su uso excesivo puede generar distracciones y afectar la interacción social.
Beneficios de la tecnología en niños
Los investigadores encontraron que, cuando se usa de manera controlada, la tecnología puede mejorar funciones ejecutivas y potenciar el rendimiento académico. Al fomentar la participación y motivación, las herramientas digitales pueden ayudar a los niños a desarrollar habilidades cognitivas específicas.
Además, el estudio destaca que los dispositivos digitales pueden facilitar la creatividad y fortalecer la resolución de problemas en ciertos contextos educativos.
Riesgos del uso excesivo de tecnología
Por otro lado, el abuso de la tecnología en niños puede generar consecuencias negativas, entre ellas:
- Reducción de la atención sostenida
- Interrupciones en los patrones de sueño
- Dificultades en la interacción cara a cara
- Aislamiento social
- Disminución del rendimiento académico
Los expertos advierten que un uso prolongado y sin supervisión de dispositivos digitales puede afectar el lenguaje, la empatía y la capacidad de los niños para resolver problemas de manera autónoma.
El papel de los padres y el contenido digital
El estudio enfatiza la importancia de la mediación parental en el uso de la tecnología. La supervisión activa y la selección de contenido de calidad pueden potenciar los beneficios y reducir los efectos negativos.
Los investigadores subrayan que se necesita más investigación para entender los impactos a largo plazo del uso de la tecnología en niños y formular directrices adecuadas para una integración saludable en sus vidas.
Participantes del estudio
La investigación contó con la participación de Ismael Martínez Guardado, de la Universidad Politécnica de Madrid, junto a expertos de la Universidad Europea, la Universidad de Nebrija, la UNIE y la Universidad de la Costa (Colombia).
El estudio destaca que la tecnología en niños puede ser una herramienta poderosa para el aprendizaje, siempre que se regule su uso para evitar efectos negativos en su desarrollo cognitivo y social.