Panamá, que acumula 125 mil 739 casos de COVID-19 y 2 mil 585 defunciones, avanzó este martes en su ensayo hacia una “nueva normalidad”; al anunciar que levanta la cuarentena total de los días domingos y restablece el uso de las playas y balnearios a nivel nacional.

El ministro de Salud de Panamá, Luis Francisco Sucre, informó que la visita a las playas y balnearios será efectiva desde el próximo sábado, mientras que la eliminación de la cuarentena tendrá curso a partir del domingo que viene.

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Sin embargo, se mantendrá el toque de queda que rige desde las 11:00 de la noche hasta las 05:00 horas.

El acceso a las playas y balnearios se realizará cumpliendo con las medidas de bioseguridad que contemplan, entre otros, que solo se permitirán burbujas o núcleos familiares de 7 personas y que queda prohibida la venta de bebidas alcohólicas o la presencia de vendedoras ambulantes.

Los restaurantes y fondas que operen en estos lugares deberán cumplir con los protocolos sanitarios y contar con los permisos legales respectivos.

Sucre indicó que para la adopción de estas nuevas medidas se tomó en cuenta el comportamiento de los indicadores pandémicos, aunque advirtió que “normalmente con la apertura que hemos estando llevando a cabo debe haber un aumento en las cifras” de casos positivos.

De hecho, aseguró Sucre, “de la semana pasada a esta hemos tenido un aumento leve y gradual” de las cifras, aunque éstas, dijo, “no nos llevan a la decisión de parar el programa o plan de reapertura”.

El director de la Caja de Seguro Social CSS, Enrique Lau, señaló que hay que estar preparados para un repunte de la pandemia ya que “al tener más gente en la calle vamos a tener más casos”, y “la única diferencia es cuál va a ser la actitud de la población frente a esta situación”.

“Tenemos que prepararnos para convivir con este virus, al menos en los próximos dos años, independientemente de que aparezca una vacuna”, afirmó Lau.

El comportamiento de la enfermedad en Panamá

Panamá intenta una “nueva normalidad” tras reabrir de manera gradual casi todo el comercio no esencial y el turismo. Con el reinicio total el pasado 12 de octubre de las operaciones del aeropuerto internacional de Tocumen, un importante centro de conexiones regional; tras siete meses de cierre y restricciones por la pandemia en curso.

El Ministerio de Salud, MINSA, informó en su reporte diario que en las últimas horas se dieron 558 nuevos casos de COVID-19 y 11 muertes por la enfermedad; en 227 días de pandemia.

Hay 717 hospitalizados, de ellos 604 en sala general y 113 en las Unidades de Cuidados Intensivos, UCI.

Aisladas en sus domicilios con cuadros leves permanecen 19 mil 926 personas, y otras 483 en hoteles-hospitales.

Desde que Panamá descubrió el primer caso de contagio, el 9 de marzo pasado; se han aplicado 591mil 504 test de detección de COVID-19, con un porcentaje global de positividad del 24 %.