En la auxiliatura de la Procuraduría de Derechos Humanos en Quetzaltenango, se reunieron destacadas figuras del Centro Universitario de Occidente (Cunoc), autoridades de salud y representantes de la Procuraduría, con un objetivo claro: encontrar soluciones para los estudiantes de medicina que están por concluir su formación y necesitan realizar su Ejercicio Profesional Supervisado (EPS) tanto en entornos rurales como hospitalarios.
La reunión, presidida por la delegada de la PDH en el departamento, Flor Gómez, busca alternativas para garantizar que los estudiantes del último año de medicina puedan cumplir con los requisitos académicos necesarios para su graduación.
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Uno de los principales desafíos que enfrentaban los estudiantes era la reducción del cupo disponible para realizar su EPS, lo que ponía en riesgo su proceso de egreso de la universidad. Conscientes de esta situación, tanto estudiantes como autoridades del Cunoc y representantes del Ministerio de Salud se sentaron a la mesa para encontrar soluciones concretas.
Durante la reunión preliminar, se discutieron diversas estrategias para ampliar la oferta de espacios tanto en áreas rurales como en entornos hospitalarios, asegurando que todos los estudiantes próximos a graduarse tengan la oportunidad de completar esta importante etapa de su formación profesional.
Se acordó realizar nuevos acercamientos con el Ministerio de Salud para definir la cantidad exacta de espacios disponibles y los lugares donde asignarán a los futuros profesionales de la medicina.
