En las últimas horas circula en las redes sociales un video sobre un entierro en Sololá, donde se denuncia que en el ataúd no iba el cuerpo de una persona víctima del coronavirus.  

El video, describe la fecha de “junio 2020” sin especificar qué día fue tomado. Y lleva la leyenda: “Sololá, ataúd vacío sin muerto”.

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Luego, se observa cómo personeros del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social -MSPAS-, quienes portan trajes especiales para este tipo de procedimientos, descienden de una ambulancia con el ataúd.

Los asistentes al entierro colaboran con los trabajadores de Salud para descender el féretro, y posteriormente se pide que el mismo sea abierto.

Sololá: Se generan dudas durante inhumación

Y es ahí donde se genera la confusión entre los internautas. Para muchas personas, el ataúd está vació, pero para otras no. Todo ello se hace más difícil determinarlo debido a la baja calidad del video, sumado a los movimientos bruscos entre la población que lloraba a su vecino.

Pero el Ministerio de Salud confirmó que la persona sí iba en el ataúd pero al tener una bolsa blanca es difícil identificarlo. Además, se aclara que el entierro se logró ejecutar, pero el video no lo muestra.

Protocolo para entierros por pandemia COVID-19

Uno de los detalles que también llamó la atención del video es la cantidad de personas que le dan el último adiós a la víctima. Ya que en la actualidad existe un protocolo para efectuar inhumaciones el cual no permite más de 10 personas por servicio.

De acuerdo a los “lineamientos para el manejo de cadáveres coronavirus” del Ministerio de Salud, se establecen los siguientes parámetros:

  • El personal que manipule los cadáveres debe contar con el equipo de protección personal completo -mascarilla N95, guantes de látex descartables, gafas protectoras, traje quirúrgico o delantal de manga larga con puños-, y debe aplicar higiene de manos y limpieza ambiental.
  • Los familiares no podrán apoyar en el embalaje del cadáver. Solo el personal de Salud y de la funeraria.
  • El cuerpo será colocado en una bolsa especial antes de ser introducido en el ataúd y por la seguridad de los familiares no debe abrirse.
  • Se desinfectarán las pertenencias y objetos que estuvieron en contacto con la persona fallecida -mesas, camas, muebles y pisos-.
  • No se realizará embalsamamiento.
  • Solamente se pueden enterrar personas en los cementerios oficialmente autorizados, públicos y privados.
  • El funeral deber ser inmediatamente después del fallecimiento -6 horas máximo-.
  • Se prohíbe la velación y servicios religiosos.
  • Únicamente podrán acompañar 10 personas cómo máximo al entierro.
  • Queda prohíba la asistencia de niños y ancianos.
  • El funeral no debe de durar más de 15 minutos