La emblemática Torre Eiffel de París regresó a la normalidad tras haber sido evacuada hoy durante unas dos horas a raíz de una alerta por amenaza de bomba que resultó ser falsa, según confirmaron a EFE fuentes de la sociedad que explota el monumento.
El desalojo de la torre se produjo alrededor de las 13.30 hora local (11.30 GMT) y el área quedó temporalmente cerrada al público, con el tráfico cercano también cortado.
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Se trataba de una “medida de precaución”, según indicaron entonces fuentes policiales a los medios locales, y el origen de la amenaza de bomba era desconocido.
Aproximadamente dos horas después, las fuerzas de seguridad levantaron la alerta y comenzó la reapertura al público, indicaron a EFE fuentes de la Sociedad de Explotación de la Torre Eiffel (SETE).
La evacuación afectó tanto a los tres pisos de la torre como al restaurante y la plaza alrededor de la estructura, de 330 metros de altura y ubicada en el distrito VII de París.
Con casi seis millones de visitantes en 2022, la icónica torre de hierro es uno de los monumentos más frecuentados del mundo.
La Torre Eiffel
La Torre Eiffel, con su majestuosidad de hierro forjado, se alza en el corazón de París como un testigo intemporal de la innovación y el espíritu artístico del pueblo francés. Inaugurada en 1889 como puerta de entrada a la Exposición Universal de París, esta estructura de 324 metros fue, durante años, el edificio más alto del mundo. Diseñada por el ingeniero Gustave Eiffel, la torre no solo es una proeza de ingeniería, sino también un símbolo del orgullo y la identidad nacional de Francia.
Durante su construcción, la Torre Eiffel fue objeto de controversia. Muchos criticaron su diseño, considerándolo una monstruosidad de hierro que desfiguraría el paisaje parisino. Sin embargo, con el tiempo, se ha convertido en uno de los monumentos más icónicos y reconocidos del mundo, atrayendo a millones de visitantes cada año.
Hoy en día, la Torre Eiffel no solo es un punto de referencia para los turistas, sino también un recordatorio de la capacidad humana para crear maravillas a través de la ciencia y el arte. Ya sea admirada durante el día con su estructura grisácea o iluminada por la noche con un juego de luces centelleantes, la torre sigue siendo un testimonio del ingenio humano y un emblema del amor y la belleza que París representa para el mundo.