Un grupo de 350 migrantes recorre el Istmo de Tehuantepec sin un destino claro, luego de partir el 24 de enero desde Tapachula, Chiapas, en un contingente inicial de 1,500 personas.
Las noticias sobre el endurecimiento de las políticas migratorias en EE.UU. han frenado a muchos de ellos, que ahora avanzan sin prisa y con la esperanza de que la situación cambie.
Migrantes en Oaxaca buscan refugio temporal
El grupo llegó al municipio de Zanatepec, Oaxaca, luego de caminar 25 kilómetros bajo temperaturas superiores a los 30 grados Celsius. Allí, las autoridades municipales les ofrecieron un espacio abierto con un techo improvisado para descansar una noche.
La incertidumbre domina a los migrantes. Maritza Escobar, madre salvadoreña, dejó a sus tres hijos en El Salvador con la promesa de trabajar en Estados Unidos y construirles una casa. Sin embargo, la falta de opciones la ha hecho replantearse su viaje:
“Imagínense el lugar donde lo vienen a meter a uno, como si fuera un animal. La Comar no sirve, las citas las detuvieron y uno se arriesga en estos lugares a lo que venga”, expresó.
Las autoridades locales les han brindado agua purificada, alimentos y la opción de retornar a sus países de origen si deciden no seguir.

Endurecimiento de políticas migratorias en EE.UU.
Desde la toma de posesión de Donald Trump el pasado 20 de enero, el Gobierno de México ha reforzado sus medidas de control migratorio. Como parte de un acuerdo con Estados Unidos, el Gobierno mexicano desplegó 10,000 agentes de la Guardia Nacional en la frontera sur.
Los acuerdos entre Claudia Sheinbaum y Trump buscan combatir el tráfico de drogas y frenar la migración indocumentada. Sin embargo, estas medidas han dejado a miles de migrantes en pausa, sin respuestas claras y expuestos a deportaciones masivas.
Incertidumbre y miedo en la frontera
Los migrantes esperan llegar a Ciudad de México y continuar su camino hacia la frontera con EE.UU. No obstante, la situación es incierta. Esmeralda Castaneda, migrante salvadoreña, explicó su postura ante la crisis migratoria:
“Yo voy paso a paso, así calmadita, porque yo sé que eso va a pasar. Estamos esperando a que baje la marea y vamos con paciencia, no con prisa.”
Con las nuevas restricciones y el aumento de deportaciones, el futuro de la caravana migrante sigue siendo incierto.