El “códice Sassoon”, el ejemplar de la Biblia hebrea más antigua y completa de la que se tiene constancia, se subastó este miércoles en Nueva York por un precio final de 38,1 millones de dólares (35,1 millones de euros).

La casa de subastas Sotheby’s, que lo valoraba entre 30 y 50 millones, indicó que el precio alcanzado en la puja, que duró unos cinco minutos, es el más alto para cualquier documento manuscrito, si bien no llegó al récord para un documento histórico.

Lee también: Montana se convierte en el primer estado en prohibir TikTok en Estados Unidos

Al comprador lo reconocieron después de la subasta: ANU, el Museo del Pueblo Judio de Tel Aviv (Israel), cuyos representantes señalaron que se trataba de un “momento histórico” y con la compra consiguen que la biblia vuelva “a casa”.

Fechado en torno al año 900 d.C. y procedente de un territorio entre lo que hoy es Israel o Siria, el manuscrito reúne, a falta de unos doce folios, los 24 libros de la biblia hebrea, incluyendo vocales, puntuación, acentos y anotaciones.

Esos 24 libros, divididos en tres partes -el Pentateuco, los Profetas y los Escritos- constituyen la base del judaísmo, así como de las otras religiones monoteístas: el cristianismo (que lo llama “Antiguo Testamento”) y el islam.

Escrito sobre un pergamino de piel de oveja

El ejemplar de 792 páginas posiblemente lo copió un escriba en un plazo de uno o dos años sobre pergamino de piel de oveja, lo que requirió importantes recursos que lo sitúan como un “objeto de lujo y rareza extremos”, indica Sotheby’s.

Pasó de mano en mano hasta que lo donaron a la sinagoga de Makisian (noreste de Siria) en el s.XIII, pero esta la destruyeron a finales del siglo siguiente y el manuscrito lo entregaron a un miembro de la comunidad para que lo preservara hasta la reconstrucción del templo, algo que nunca sucedió.

El códice permanece entonces en paradero desconocido durante varios siglos hasta que sale al mercado en 1929 y se hace con él David Solomon Sassoon (1880-1942), el mayor coleccionista de manuscritos hebreos y judaicos del siglo XXI.

El ejemplar es más antiguo y completo que otra copia de la biblia hebrea que ya se conocía, el códice de Aleppo, pero no se había determinado su fecha de origen científicamente hasta hace poco, cuando su propietario actual -desconocido- lo sometió a pruebas científicas y de carbono.

Antes de su subastarlo en Nueva York, Sotheby’s embarcó al códice en una gira mundial que comenzó en Israel, donde despertó un gran interés.

El códice Sassoon llena un vacío entre la actual forma moderna de la Biblia hebrea y el testimonio más arcaico de sus escrituras, los Manuscritos del Mar Muerto o Rollos de Qumrán, del año 250 a.C. al 66 d.C., que tras su descubrimiento en 1947 son considerados uno de los grandes hallazgos arqueológicos del siglo XX.