El número de cigarros vendidos por las compañías fabricantes más grandes aumentó un 0,4 % en 2020, el año de la pandemia; un incremento leve aunque el primero en dos décadas, en un periodo en el que el gasto en publicidad subió casi un 0,3 %. Esto según un informe de la Comisión Federal de Comercio (FTC).

El año pasado, esas compañías vendieron 203 mil 700 millones de cigarros, frente a los 202 mil 900 millones del año anterior.

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Los datos de la FTC no indican, en cualquier caso, un fuerte retorno del tabaquismo en Estados Unidos décadas; esto después de las demandas contra la industria. También contra las restricciones en la venta de esos productos a los menores de edad, y en la publicidad permitida.

Entre las razones que explican ese leve aumento está el trabajo desde casa. El pasado mes de julio, el presidente de Altria, Billy Gifford, opinó ante los inversores que durante la pandemia aumentaron las ocasiones para fumar durante el día, debido al teletrabajo.

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) en 2019 los fumadores eran el 14 % de la población adulta; esto comparado con un 43 % en 1965.

Promueven el tabaco sin humo

Por su parte las ventas de “tabaco sin humo”, que se usa para mascar, subieron de 57,15 millones de toneladas en 2019 a 57,6 millones de toneladas en 2020, añadió el informe.

El monto de dinero gastado en la publicidad y promoción de los cigarros subió de 7 mil 620 millones de dólares en 2019 a 7 mil 840 millones de dólares en 2020; en tanto que los descuentos pagados a los minoristas (6 mil 070 millones de dólares) y los mayoristas (876 millones) dieron cuenta del 88,5 % del gasto de la industria.

Tabacaleras gastan en promocionar tabaco y no solo en cigarros

El gasto de las tabacaleras para la publicidad y promoción de estos productos de mascar bajó; de 576,1 millones de dólares en 2019 a 567,3 millones de dólares el año pasado.

Los esfuerzos de las autoridades sanitarias y del sector privado para reducir el consumo de tabaco llevaron, desde 2014, a la suspensión de la venta de esos productos en cadenas de farmacias; además de tiendas como CVS, Cotsco, Walmart y Sam’s Club.